En muchas ocasiones, llegar al público objetivo adecuado, resulta tan importante o más que el propio mensaje que se transmite. Quiero contar dos experiencias personales que me han ocurrido en las últimas semanas, que creo que ilustran bastante bien esto.
La primera se refiere a una faceta mía cachonda, friki e irreverente, que muestro poco en este blog. Dando un paseo por la costa de Isla Plana en Cartagena, vi una señal que me hizo gracia y decidí confeccionar uno de esos cartelitos que se comparten por redes sociales. Lo subí a mis perfiles personales de Facebook y Twitter pero no tuvo ningún éxito.
Pero después lo compartí con la página de Facebook DAME POST Y DIME FRIKI, que sigo y que, como sugiere su nombre se dedica a compartir cosas graciosas y «Frikis». El administrador de la página lo encontró interesante y lo compartió con sus 106.000 fans. El resultado, después de 4 días es de 323 «Me gusta» y ha sido compartida por 153 usuarios.
La otra experiencia se refiere a la aparición de Eternalia en la revista Emprendedores del pasado mes de Enero, de la que hablé en este blog. La repercusión en cuanto a nuevos clientes no la he notado, pero en cuanto a solicitudes de información para franquicias, el mes de Enero a cuadriplicado lo que suele ser un mes normal. En otras ocasiones había aparecido en medios con más audiencia (ABC, LaInformación.com, etc.) pero no había conseguido estos resultados.
En ambos casos se ha llegado al público objetivo adecuado y los resultados han sido mucho mejores que los que se consiguen llegando a un público mas general. Es cierto que el contenido debe ser interesante para obtener cierto grado de respuesta, pero no basta con eso para alcanzar el éxito.
Hola,
Es una reflexión interesante que confirma que no es la mejor opción la de matar moscas a cañonazos y la ventaja y mejora del ROI de la segmentación de público en las acciones de MKT.