Tradicionalmente el desarrollo de estudios en el ámbito de las ciencias sociales pasaba por la realización de cuestionarios a individuos y/o a empresas. Pero en los últimos años, con el advenimiento de internet, estas prácticas han dejado de tener sentido en ciertos ámbitos de la investigación. Por el desarrollo de mi tesis doctoral, me centro en dos casos concretos en los que no tiene mucho sentido el seguir preguntando:

  • Al realizar estudios sobre la satisfacción de los clientes de los hoteles.
  • Al estudiar el uso de las redes sociales por parte de los hoteles.

stupidEn el primer caso, con bases de datos como las de Booking.com o TripAdvisor, hacer estudios utilizando las tradicionales encuestas ha dejado de tener sentido para cuestiones generales, como explicaba en un post anterior. Puede ser de utilidad, cuando se trata de testar aspectos muy concretos y específicos, que no se reflejan en estas bases de datos. Pero aún en estos casos, el esfuerzo que supone conseguir unos cientos de encuestas por métodos tradicionales es similar a obtener cientos de miles recurriendo a esta información gratuita.

En un artículo recientemente publicado, hablaba sobre dos estudios realizados sobre el uso de las redes sociales por parte de los hoteles y por las Pymes españolas. En ambos casos se había enviado una encuesta a un nutrido grupo de empresarios, con índices de respuesta bastante bajos (como suele ser normal en estos casos). Sospecho que los datos obtenidos tienen cierto sesgo, ya que los hoteles que no hacen uso de redes sociales (sabiendo que seguramente deberían hacerlo y que se han quedado un poco anticuados) tenderán a no colaborar en el estudio. Esto da lugar a datos muy positivos, que no necesariamente coinciden con la realidad.

Lo más operativo y sencillo en estos casos es realizar una selección, más o menos aleatoria de empresas y comprobar personalmente su presencia en redes sociales. Además de gratuito, seguramente sea más rápido y sencillo que enviar miles de encuestas y esperar varios meses para recibir unos cientos, rellenadas “a saber de qué forma”. Esto sirve tanto para hoteles como para cualquier otro tipo de negocio o sector.

Mejor no preguntes
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